sábado, 7 de abril de 2012

Repudio a la Semana Santa


Estimados adictos a la Semana Santa, procesiones y misas del gallo:
¿Que pasaría si Jesús apareciera hoy de nuevo en la tierra.....?
1. Iría a darle esperanza a todos aquellos discriminados y olvidados por las Iglesias.
2. Se enfrentaría a los fariseos de hoy: Los obispos de la Metodista, la Pentecostal, Bautista, Billy Graham, y el resto de tele-predicadores... la generación de víboras.
3. Seria acusado nuevamente por el Sanedrín de hoy (La Congregación de la Fe en Roma, Ratzinger y sus sepulcros blanqueados) y nuevamente crucificado.
Así que sigan golpeándose el pecho, dándose cabezazos en las bancas, y jurando que Dios les dejara entrar al paraíso.
Amen.

¿Que les dirías, Jesús? ¿ Visitarías al Papa y lo felicitaría por su gran obra? ¿Hablaría con Billy Graham y le palmotearía la espalda, por lo bien que lo ha hecho?

Los religiosos hace tiempo han olvidado el espíritu del Sermón del Monte. Un mensaje de esperanza, misericordia a los olvidados, los golpeados, los desposeídos.

Solamente se encontraría con que su mensaje se perdió en la noche de los tiempos, y fue tergiversado y utilizado por los poderosos, en comunidad con la misma "Iglesia" para seguir manteniendo la opresión. Utilizado para nublar la mente del pueblo llano, llenarlo de mentiras, de culpas, de miserias, y justificarlo bajo el estudio de la palabra de Dios.

La Iglesia Católica, ya sea Romana u Ortodoxa, y sus hijas, las Iglesias Protestantes, desde el comienzo han copulado con el "poder temporal", han influido en la política y se han convertido en simples organizaciones terrenas, con objetivos terrenos, alejadas completamente del origen de las palabras de Carpintero.

Las mas grandes matanzas, los mas grandes crímenes, todo se ha justificado por defender "La Palabra del Señor". La misericordia, la templanza, la piedad, ha estado ausente desde el momento mismo que te fuiste, Carpintero.

Y el día de hoy, mientras el mundo de vuelca a las calles a recordar tu muerte, tu resurrección y tu palabra, dándose panzadas de pescado y mariscos para "no pecar", seguirá muriendo gente inocente, padeciendo hambre, sedientos de justicia, niños violados en los conventos, niñas violadas en sus casas, mujeres abortando de forma ilegal y sin derecho a asistencia sanitaria mínima, homosexuales prostituyéndose para vivir, los alcohólicos y drogadictos suicidándose poco a poco, todos sin esperanza, sin aliento, sin comprender que en este mundo, hace dos mil años, viniste a liberarlos ¿Y para que! Finalmente, fueron oprimidos por tus propios seguidores. Traidores. Tal como lo hicieron contigo, lo han hecho con tus palabras.

Oh Carpintero, tu sacrificio fue en vano. Por favor, perdónanos, porque ahora si que no saben lo que hacen. No vuelvas a este mundo, Jesús. Es solo un desierto, un desierto en que los oasis están llenos de poderosos y sacerdotes, mientras las vastas llanuras, tan resecas como las piedras que no quisiste convertir en pan, están llenas de desposeídos, olvidados y sin esperanza. ¡Otra vez!